La avalancha de inmigrantes en Ceuta deja catorce cadaveres

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Melilla (España), 7 feb (EFE).- Unos 1.400 subsaharianos intentaron a lo largo de la madrugada de hoy entrar en la ciudad española de Melilla (norte de África) a través de la valla fronteriza con Marruecos, informó hoy la delegación del Gobierno de España. Los inmigrantes, reunidos en distintos grupos, no consiguieron su objetivo gracias al despliegue de seguridad que se estableció tanto en territorio español como en el lado marroquí. El primer grupo estaba compuesto por unas 800 personas, que se dirigían a la valla desde los campamentos en los que viven en el monte Gurugú, en territorio marroquí. Sin embargo, el protocolo "anti-intrusión" de la Guardia Civil española, en colaboración con efectivos de la Gendarmería marroquí, impidió que este grupo consiguiera acercarse y tocar la valla. En distintos puntos del perímetro se detectaron, en diferentes horas, otros grupos, unos de los cuales, formado por unos 400 inmigrantes, se avistó en las proximidades del cauce del Río de Oro. Estas aproximaciones de inmigrantes también se produjeron en la madrugada del jueves, en la que ese detectaron dos grupos, uno de 200 y otro de 600 inmigrantes, que fueron avistados en las cercanías del puesto de Barrio Chino el jueves. Las ciudades españolas de Ceuta y Melilla, fronterizas con Marruecos, sufren en los últimos meses asaltos de emigrantes subsaharianos acampados en sus alrededores, que intentan llegar a Europa a través de España, bien saltando las vallas fronterizas o a bordo de pateras que cruzan el Estrecho de Gibraltar. Ayer, en la ciudad de Ceuta, murieron al menos 9 inmigrantes cuando intentaban entrar a nado a la ciudad desde la playa del Tarajal (Marruecos). Este suceso se añade al ocurrido el pasado 2 de febrero, cuando cinco cadáveres de subsaharianos aparecieron en las costas marroquíes del Mediterráneo, entre Nador y Driuch, al sur de la ciudad española de Melilla, probablemente víctimas del naufragio de una patera. Trece cadáveres han aparecido entre ayer y hoy en las cercanías de Ceuta, todos en el lado marroquí de la frontera, tras la avalancha fallida del jueves de cientos de subsaharianos que intentaron penetrar en la ciudad española. Según dijeron a Efe fuentes cercanas a la investigación del suceso, algunos de los cadáveres han aparecido hoy, más de veinticuatro horas después de producirse los hechos. Por su parte, fuentes marroquíes de la región de Fnideq (Castillejos) solamente reconocen oficialmente la aparición de nueve cadáveres, uno de ellos de una mujer, y se niegan a dar otros detalles como la nacionalidad de los muertos o los rescatados con vida (que ayer eran trece). Al haberse producido la avalancha en el lado marroquí de la frontera, dentro de Marruecos ha circulado poca información y se desconoce la nacionalidad de los fallecidos o si se han rescatado nuevas personas con vida. También se ignora el número de detenidos y su destino. En el Hospital Hasán II de Castillejos, adonde ayer fueron trasladados los muertos y los heridos, solamente confirmaron la llegada de siete cadáveres, y dijeron desconocer si hoy se han encontrado los cuerpos de otros fallecidos. Las fuentes cercanas a la investigación relataron que la avalancha se produjo en varios frentes abiertos al mismo tiempo por los cerca de 400 inmigrantes, que fueron repelidos en primer lugar por la Gendarmería marroquí. No está claro si los emigrantes se lanzaron al agua tratando de acceder a España o simplemente huyendo de los agentes, pero las fuentes marroquíes dieron a entender que los fallecidos perdieron la vida por ahogamiento. Hasta el momento, Marruecos solamente ha ofrecido una breve declaración de las autoridades locales de Castillejos dos horas después de producirse los hechos, y no se ha aportado posteriormente ningún detalle. La prensa marroquí tampoco publica hoy nuevos datos de lo sucedido. El director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, ha negado hoy que los agentes emplearan armas de fuego y pelotas de goma contra alguno de los al menos nueve inmigrantes subsaharianos que han fallecido ahogados cuando trataban de entrar a nado en Ceuta. En declaraciones a la cadena Ser recogidas por Efe, Fernández de Mesa tilda de "muy injusto" que alguien pueda pensar que la Guardia Civil haya disparado a algún inmigrante cuando lleva muchos años defendiendo y "arriesgando su vida" por estas personas. Ha negado tajantemente el empleo de armas de fuego en el mar, así como el lanzamiento de pelotas de goma, que sí ha admitido se usaron en la valla fronteriza para impedir el asalto que pretendía un número importante de subsaharianos. Fernández de Mesa también ha señalado que la actitud de los inmigrantes de una agresividad "descomunal", ya que no solo arrojaron objetos y piedras a los agentes, sino que también llegaron a destrozar una garita de vigilancia y dañaron un vehículo. Pese a esa violencia "absoluta" que no es la primera vez que se da en las fronteras de Ceuta y Melilla, el director ha defendido que los agentes del instituto armado actúan "con una ejemplaridad y un trato exquisito" hacia los inmigrantes. "Lo que hace la Guardia Civil es cumplir y hacer cumplir la ley", ha reiterado Fernández de Mesa que también ha negado que hubiera alguna orden para actuar con más contundencia contra los inmigrantes que trataban de entrar en Ceuta. EFE lca/agc -SUCESOS INMIGRANTES (Resumen) La frontera de Ceuta recupera la normalidad mientras buscan nuevos cadáveres Ceuta, 7 feb (EFE).- La frontera del Tarajal que separa Ceuta de Marruecos ha recuperado esta mañana la normalidad después de la situación vivida ayer con el intento de entrada de más de 250 inmigrantes subsaharianos, de los que nueve murieron ahogados, mientras se buscan más cadáveres en el mar. La Guardia Civil y la Policía Nacional mantienen hoy un control especial en el paso fronterizo ante la posibilidad de que se puedan producir nuevos intentos de asalto masivo, si bien fuentes policiales han dicho a Efe que no se han incrementado las medidas de seguridad. Una patrullera de la Guardia Civil ha rastreado las aguas jurisdiccionales españolas próximas a la frontera sin encontrar nuevos cadáveres, aunque la búsqueda se centra en la costa marroquí. La 207 Comandancia de la Guardia Civil ha asegurado que en la avalancha de ayer no se registraron disparos con armas de fuego y sí se utilizó material antidisturbios -pelotas de goma y balas de fogueo- pero nunca dirigidos hacia los inmigrantes que intentaban entrar en la ciudad. El incidente ha dado paso hoy a una jornada de relativa tranquilidad en la aduana del Tarajal, cuyo tránsito se ha normalizado después del cierre obligado de ayer durante más de media hora por la avalancha. Mientras tanto, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha solicitado comparecer en el Congreso de los Diputados para explicar lo sucedido en la frontera de Ceuta. Ha sido la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, quien ha anunciado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que hoy mismo el ministro del Interior ha registrado en la Cámara Baja su solicitud de comparecencia en la Comisión de Interior, una petición que también habían solicitado PSOE, IU, BNG e ICV. El director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, viajará a Ceuta en breve, cuando lo permitan las condiciones meteorológicas, para conocer de primera mano lo ocurrido ayer, cuando nueve inmigrantes fallecieron al tratar de alcanzar la costa a nado. El portavoz de Interior del PSOE en el Congreso, Antonio Trevín, ha pedido hoy la comparecencia urgente en la Cámara Baja del ministro del Interior, mientras José Luis Centella, de Izquierda Plural, ha pedido la dimisión de Jorge Fernández por la "represión" ejercida por la Guardia Civil en Ceuta. IMÁGENES: RECURSOS DE LA FRONTERA HISPANO-MARROQUÍ EN CEUTA Y MELILLA Y REGISTROS DE LAS CÁMARAS TÉRMICAS DE VIGILANCIA DE LAS FUERZAS DE SEGURIDAD. Palabras clave: efe,inmigrantes,ceuta,marruecos